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450 g de masa de hojaldre, congelada o preparada en casa, 60 g de queso curado, suave, rallado,
2 cucharadas de leche,
2 yemas de huevo,
60 g de queso Emmental, rallado,
1/2 cucharadita de pimentón dulce
Si es congelada, dejar descongelar la masa de hojaldre 30-60 minutos y luego dividirla en dos partes.
Para hacer los lazos de queso, esparcir parte del queso suave rallado sobre la tabla pastelera y extender encima la masa
hasta un grosor de 1/2 cm.
Batir la leche con las yemas y untar con ello la superficie de la masa.
Esparcir de nuevo por encima, parte del queso, doblar la masa y volver a extenderla.
Esparcir por último el resto del queso sobre la superficie. Extender la masa hasta un grosor de 3 mm, cortarla en tiras
de 8 cm de ancho y colocar las tiras de 4 en 4. una encima de otra.
De ahí, cortar rodajitas de 1/2 cm de gruesas y retorcerlas en forma de lazos.
Mojar con agua fría una bandeja del horno, poner encima los lazos y dejarlos reposar 15 minutos.
Calentar el horno a 210º.
Cocer los lazos 8-10 minutos a altura media.
Proceder con la segunda mitad de la masa como con la primera, pero esparciendo en cada ocasión el queso Emmental mezclado
con el pimentón sobre la masa.
Con un cortapastas de medita cortar la lámina de masa en tiras de 10 cm de largo, untar éstas con el resto de la yema
batida y esparcir por encima el queso restante.
Cocer de igual modo las barras 8-10 minutos.
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