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400 g de harina,
120 g de azúcar,
un pellizco de sal,
la corteza de 1 limón rallada,
un paquetito de vainilla en polvo,
1 yema de huevo,
1 copita de licor de ron (2 cl),
250 g de mantequilla
2 cucharadas de azúcar en polvo,
250 g de mermelada de albaricoque
Tamizar la harina sobre una superficie lisa.
Hacer un hoyo en el centro e introducir en él el azúcar, la sal, la corteza de limón, la vainilla, la yema y el ron. Distribuir
la mantequilla en trochos por la masa.
Trabajar todos los ingredientes hasta conseguir una masa quebrada.
Dejarla reposar envuelta en papel de aluminio durante 2 horas en el frigorífico.
Calentar el horno a 180º.
Extender la masa sobre una superficie enharinada de forma que tenga 3 mm de espesor.
Cortar en la masa discos y aros del mismo tamaño y en igual número.
Cocer a altura media durante 10-15 minutos.
Desprender las pastas de la bandeja de horno con la ayuda de un cuchillo ancho y dejar enfriar sobre una rejilla. Espolvorear
los aros con azúcar en polvo tamizada.
Calentar a fuego lento la mermelada, untar con ella las pastas redondas y colocar encima los aros.
Poner más mermelada en el centro de los aros.
Dejar secar bien antes de guardar.
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