500 g de harina,
30 g de levadura prensada,
50 g de azúcar,
1/4 l de leche templada,
60 g de mantequilla,
1 huevo,
un pellizco de sal,
la corteza de 1 limón rallada
100 g de masa de mazapán cruda,
150 g de avellanas picadas,
100 g de azúcar,
3 claras de huevo
1 yema de huevo,
1/2 taza de azúcar en polvo,
1 clara de huevo,
un poco de baño de chocolate graso
Para la bandeja del horno: margarina
Engrasar ligeramente una bandeja de horno.
Tamizar la harina en una fuente.
Amasar en el centro la levadura desmenuzada con un poco de harina, azúcar y la leche y dejar fermentar la masa tapada
15 minutos.
Amasar el resto del azúcar, la mantequilla derretida, el huevo, la sal y la corteza del limón con la masa fermentada previa
hasta que haga burbujas y dejar fermentar otros 15 minutos.
Mezclar la masa de mazapán con las avellanas, el azúcar y las claras.
Extender la masa fermentada de forma que tenga 4 mm de espesor.
Cortar 20 redondeles de 8 cm de diámetro y otros 10 de 4 cm de diámetro.
Formar orejitas con el resto de la masa.
Distribuir el relleno en los 10 redondeles grandes, pintar los bordes con yema, colocar encima otro redondel grande y
apretar bien los bordes.
Hacer los hocicos y la nariz con los redondeles pequeños. Pintar las orejas y los hocicos con yema y colocarlos sobre
los redondeles grandes.
Pintar los cerditos con yema en la bandeja del horno y dejar fermentar 15 minutos.
Calentar el horno a 200º.
Cocer los cerditos unos 15 minutos a altura media.
Batir el azúcar en polvo con la clara de huevo.
Derretir el baño de chocolate.
Hacer los ojos de los cerditos con estos dos baños.
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